Cómo recuperar la figura tras las Navidades

6 de enero. Llegas al baño, te subes a la báscula y descubres unos regalos que no esperabas... ¡los kilos de más! Cenas de empresa, comidas familiares, comilonas con amigos... todos hemos pecado durante las fiestas y es inevitable ganar un poco de peso en la llamada cuesta de enero. Si no habéis sido capaces de controlar estos excesos siguiendo los consejos que os proponía antes de Navidad ha llegado el momento de darle un respiro bien merecido a nuestro estómago y recuperar la figura siguiendo algunos consejos.

Hacer deporte

Es un clásico prometerse hacer ejercicio estas fechas, pero es también una meta plausible. Los gimnasios se llenan a la vuelta de vacaciones y aumenta también el número de socios. Si no estás acostumbrada a hacer deporte, ¿qué mejor propósito de año nuevo que empezar quemando calorías? El abanico de opciones es muy amplio. Desde caminar todos los días media hora hasta pasar un par de horas en el gimnasio. También puedes divertirte quemando grasa haciendo zumba, pilates e incluso Crossfit, que está tan de moda. Los deportes en equipo son otra opción, que además sirve para relacionarse socialmente, motivarse y hacer ejercicio. Baloncesto, balonmano, hockey o el que más te guste. El mejor ejemplo es quizás Fátima Moreira de Melo, que además de ser jugadora de hockey profesional y modelo, también juega a las cartas y ha demostrado ser muy capaz en este deporte mental.

Dietas

Que quede claro, las dietas milagro no existen. Lo primero que debemos de hacer es tratar de comer variado, combinando diferentes alimentos, sobre todo frutas y verduras, y eliminar la mayor cantidad posible de grasa. Dejemos a un lado la bollería, la comida rápida, los alimentos procesados, los fritos... No vale solo con comer menos, hay que comer de manera sana y equilibrada. 

También debemos aumentar el consumo de fibra, ya que ayuda a eliminar las toxinas y las sustancias que dificultan la pérdida de grasa corporal. Un buen truco es incluir en el desayuno cereales integrales como los copos o el salvado de avena.

Aumentar el número de comidas que hacemos al día
Como decía antes, no se trata de comer menos, sino de comer sano y el número de comidas que hacemos al día es muy importante. El cuerpo metaboliza mucho mejor las pequeñas cantidades de comida que las grandes. Y es precisamente por esto que ganamos peso en Navidad: comemos mucha comida de golpe, lo que hace que nuestro metabolismo no sea capaz de consumir todas las calorías y es así que acabamos engordando. Lo ideal es hacer cinco comidas al día en pequeñas cantidades para mejorar la digestión.

Más agua y menos bebidas azucaradas
No, no es un mito, beber agua si ayuda a adelgazar. Un equipo de científicos alemanes ha demostrado que la ingesta de agua refuerza los efectos de una dieta de adelgazamiento. Se recomienda beber entre un litro y medio o dos litros de agua al día ( la regla de los 8 o 10 vasos) , ya que es la mejor forma de depurar el cuerpo, acelerar el metabolismo y eliminar toxinas. Además, si bebes antes de comer, tendrás mayor sensación de saciedad. La mayoría de nosotros desconocemos la cantidad de calorías vacías que metemos en nuestro cuerpo cuando bebemos refrescos azucarados.

Pedir ayuda a un nutricionista
Si no te ves con fuerzas para tomar las riendas por ti misma, siempre te quedará pedir ayuda a un profesional. Un nutricionista te pesará y medirá tus niveles de grasa, músculo y el famoso IMC, índice de masa corporal. A partir de estos valores detallará contigo cuáles son los objetivos que quieres cumplir y te marcará unas pautas para conseguirlo. Te dará una dieta semanal e iréis midiendo resultados cada siete días. Acudir a un nutricionista es una buena forma de adelgazar si crees que no tendrás voluntad suficiente para hacerlo por tu cuenta.

Debemos ser constantes en estas actividades si queremos perder esos kilos de más. No se trata de perderlos de golpe, sino de hacerlo paulatinamente y de forma sostenible para que así podamos mantener nuestra línea sana durante mucho más tiempo.